El clima de temporada ya se siente en el puerto de Progreso, pues este primer domingo oficial de vacaciones llegaron alrededor de 6 mil paseantes al Malecón, para tener una afluencia aproximada durante este fin de semana de más de 12 mil personas.
En tanto que las zonas de las casas de playa, de Chuburná a Chicxulub Puerto, presentan una ocupación aproximada del 90 por ciento de la totalidad de los predios de dicha zona, en donde Chicxulub presenta más del 60 por ciento del tránsito marítimo de recreo en todo el puerto.
Con un claro repunte en relación a semanas anteriores, desde el viernes y en especial este domingo de quincena, el malecón de Progreso lució una espléndida afluencia en sus playas, en donde turismo local, nacional e internacional convivió de buena manera en el lugar, disfrutando del Sol, la arena y las delicias ofrecidas en el área.
El sector hotelero de los alrededores al principal punto turístico del municipio, según la dirección de turismo de Progreso, reportó una ocupación de entre el 85 por ciento y 90 por ciento de su capacidad total, teniendo lugares con ocupación completa, al estar situados directamente sobre el propio malecón, con la impresionante vista al mar.
En recorrido por la zona se pudo observar que los restaurantes por su parte desde muy temprano comenzaron a sentir la presencia turística, al tener comensales en buena cantidad, cifra que fue en aumento hasta cerca de las 15:00 horas, según señalaron meseros como el señor Juan Medina, el cual comentó que están registrando ventas estupendas, dentro de los márgenes estimados para esta temporada, a la cual consideran aún le falta mucho por dar.
Las casas se llenan
Esta semana, los ocupantes de verano de las casas y condominios a la orilla del mar en el puerto de Progreso y sus comisarías comenzaron a llenar estos espacios, ocupándose la mayor parte de los predios de la zona, ante el éxodo de miles de vehículos de alto valor comercial, que desfilaron hasta los sitios en donde las familias vacacionistas radicarán en las próximas semanas.
Esta presencia causó un crecimiento poblacional y automovilístico en la zona, generándose problemas con el tránsito vehicular, debido a embotellamientos en calles principales de la cabecera municipal, así como en las comisarías.